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Varios tiroteos que involucran a adolescentes en un lapso de dos semanas se han vuelto en el principal foco de violencia e inseguridad. En un suburbio de Denver, una camioneta llena de adolescentes se estacionó en una preparatoria y empezaron a disparar. Por otro lado, de acuerdo al medio...
diciembre 7, 2021
En un suburbio de Denver, una camioneta llena de adolescentes se estacionó en una preparatoria y empezaron a disparar.
Por otro lado, de acuerdo al medio de SinEmbargo, Colorado es un lugar donde la policía ha estado bajo la lupa por el trato que da a los residentes de raza negra. Activistas y funcionarios dicen que el fácil acceso a las armas contribuye al problema; que ha aumentado por la pandemia de la COVID-19 y el impacto sobre todo en la salud mental de adolescentes de minorías.
En Estados Unidos, los tiroteos que involucran a niños y adolescentes han aumentado exponencialmente.
De acuerdo a un informe del Children’s Defense Fund (Fondo para la Defensa de los Niños) informó que las muertes de niños y adolescentes que fallecieron baleados alcanzó su nivel más alto en 19 años en el 2017 y sigue siendo alto. Y afirmó que los niños y adolescentes de raza negra tienen cuatro veces más posibilidades de morir baleados que los blancos.
Jason McBride, experto en prevención de la violencia que trabaja con adolescentes en la Struggle of Love Foundation en Denver y Aurora; informó que aunque el acceso a armas es una parte que contribuye al problema, algunos construyen sus propias armas, imposibles de rastrear, usando impresoras 3-D o comprando partes online y armándolas ellos mismos.
Agregó que el trauma derivado de la muerte de familiares pasa a ser algo casi normal para los adolescentes y que el hecho de que la pandemia impidió que fuesen a la escuela, que con frecuencia funciona como refugio en el que le escapan a los problemas en sus casas, agrava los trastornos mentales de algunos adolescentes.
Con información de SinEmbargo.
