En una reciente declaración, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha anunciado que su Gabinete de Seguridad será el encargado de determinar si la Fiscalía General de la República (FGR) debería intervenir en el caso conocido como “Caso Camila”. Este anuncio surge en medio de crecientes demandas de acción por parte del público y grupos de derechos humanos tras el trágico linchamiento de los presuntos agresores de la niña.
El mandatario, durante su conferencia matutina, explicó que su administración está siguiendo de cerca el desarrollo del caso y que cualquier decisión sobre la posible intervención de la FGR será tomada por el Gabinete de Seguridad, encabezado por el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.
Este pronunciamiento se produce después de que Mario Figueroa, alcalde de Taxco, Guerrero, responsabilizara al Gobierno del Estado por no haber actuado a tiempo ante el linchamiento de los presuntos agresores de la niña. Figueroa lamentó la tragedia y expresó la necesidad de que las autoridades competentes actúen con prontitud para garantizar justicia en el caso.
El “Caso Camila” ha generado una profunda indignación a nivel nacional e internacional, evidenciando la urgente necesidad de abordar de manera efectiva la violencia y el crimen en México, así como de fortalecer las instituciones encargadas de garantizar la seguridad y el estado de derecho en el país.