La presidenta Claudia Sheinbaum descartó nuevamente una reforma fiscal que implique aumentar impuestos en 2026. Su gobierno apostará por combatir la corrupción y la evasión como fuentes principales de ingresos. Durante su conferencia matutina, la mandataria respondió a los señalamientos de Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena...
agosto 26, 2025La presidenta Claudia Sheinbaum descartó nuevamente una reforma fiscal que implique aumentar impuestos en 2026. Su gobierno apostará por combatir la corrupción y la evasión como fuentes principales de ingresos.
Durante su conferencia matutina, la mandataria respondió a los señalamientos de Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena en el Senado. El legislador había planteado la necesidad de discutir una reforma tributaria amplia.
Sheinbaum fue clara: “No estamos pensando en subir impuestos el próximo año”.
La presidenta recordó que México tiene espacio para mejorar la recaudación sin afectar el bolsillo de los ciudadanos. Destacó los avances logrados en Aduanas, donde se obtuvieron ingresos adicionales por 180 mil millones de pesos tras un mayor control.
“Tenemos que seguir erradicando la corrupción y la evasión”, aseguró. Adelantó que su gobierno presentará reformas legales contra las llamadas “factureras”, empresas que venden comprobantes fiscales falsos para defraudar al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Según Sheinbaum, esas medidas darán más ingresos que un eventual aumento al IVA o al ISR. Ambos impuestos han sido el centro de los debates en torno a una reforma tributaria en los últimos años.
La mandataria mostró una gráfica que refleja el incremento en los ingresos federales. Pasaron de 2.6 billones de pesos en agosto de 2019 a más de 4.1 billones en 2025.
El miércoles, Monreal reavivó el debate. Señaló que el presupuesto enfrenta una fuerte presión por nuevas necesidades en salud, educación, reconstrucción tras las lluvias y compromisos internacionales de deuda.
“Es la opinión de Ricardo, él puede tener su opinión, no hemos platicado”, respondió Sheinbaum, quien evitó confrontaciones con el legislador.
La presidenta ha sido consistente. En diciembre de 2024 rechazó tres veces la posibilidad de una reforma fiscal. En abril de 2025 reiteró que primero debía combatirse la corrupción para aumentar los ingresos públicos.
La discusión ocurre en un escenario económico desafiante. Estados Unidos, principal socio comercial de México, enfrenta tensiones por las amenazas de aranceles del presidente Donald Trump.
El crecimiento de la economía mexicana ha sido modesto. En 2024 alcanzó apenas 1.2% respecto a 2023. Para 2025, con datos del segundo trimestre, mantiene el mismo ritmo, de acuerdo con el observatorio México ¿Cómo Vamos?
Distintas voces insisten en la necesidad de una gran reforma tributaria. Oxfam propuso en julio un plan de diez puntos para lograr una mayor justicia fiscal. Planteó impuestos progresivos, ambientales y a las grandes fortunas.
Por su parte, Coparmex defiende una reforma que simplifique el sistema, aumente incentivos y ofrezca más deducciones.
El académico Gerardo Esquivel presentó este mes una propuesta con nuevos impuestos a bebidas alcohólicas. El economista jefe de BBVA México, Carlos Serrano, advirtió que sin un ajuste tributario México corre el riesgo de perder atractivo para los inversionistas.
Sheinbaum reiteró que su gobierno priorizará el combate a las prácticas ilegales. “Eso nos dará más recaudación que cualquier incremento de impuestos”, subrayó.
La presidenta busca fortalecer los ingresos federales cerrando espacios a la evasión y garantizando mayor eficiencia en la recaudación. Con ello pretende financiar los programas sociales y las inversiones estratégicas sin elevar la carga impositiva a los ciudadanos.
Fuente: El País