El gobierno de México reiteró que continuará con su tradición humanista de otorgar asilo político a personas perseguidas por razones políticas en otros países.
Durante la conferencia matutina del martes, el subsecretario para América del Norte de la SRE, Roberto Velasco, señaló que la acción del país se realiza “de forma pacífica, en sentido humanitario y con estricto apego al derecho internacional”.
En representación del canciller Juan Ramón de la Fuente, Velasco recordó que México rechazó la decisión “unilateral” del gobierno interino de Perú de romper relaciones diplomáticas con México por el otorgamiento de asilo a la ex primera ministra peruana Betssy Chávez Chino.
Al explicar la decisión de otorgar asilo a Chávez Chino —quien fue primera ministra bajo el mandato de Pedro Castillo— Velasco indicó que la determinación “corresponde única y exclusivamente” a México.
Por su parte, la subsecretaria para América Latina y el Caribe de la SRE, Raquel Serur, enfatizó que el asilo político es un acto pacífico que no puede ser considerado un acto inamistoso, conforme a tratados e instrumentos del derecho internacional.
El funcionario también expuso que México ha mantenido una tradición histórica de asilo y refugio, remontándose a los años en que el presidente Lázaro Cárdenas acogió a ciudadanos españoles que huían de la dictadura franquista, así como a personas afectadas por dictaduras en Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil.
Fuente: La Jornada